Una notable película de aventuras en el desierto, que no llega a la altura de Lawrence de Arabia, pero resulta entretenida, profunda y con una bella música.
Película de gran fuerza, concebida como un western, muy bien dirigida e interpretada, pero con una violencia brutal en el último tramo que la desequilibra.
Redford relata el proceso contra la primera mujer ejecutada en la historia de Estados Unidos, acusada de participar en el asesinato del presidente Lincoln.