En esta secuela de “Bienvenidos a Zombieland”, el grupo de protagonistas tendrá que viajar desde la Casa Blanca hasta el corazón de los Estados Unidos.
La ópera prima de Santiago Requejo se acerca en clave de melodrama sonriente a un asunto de mucha actualidad: los prejubilados a los que pesa el ocio forzado.
La quincuagésima película de Woody Allen, sin ser una de sus grandes, no defrauda: se trata de una pequeña comedia romántica, con un toque de enredo y muchísima nostalgia.
La directora de “Quiero ser como Beckham” y “Bodas y prejuicios” recupera los temas recurrentes de su filmografía con la música de Bruce Springsteen como pretexto.
A Wanda no paran de surgirle problemas. Su hija Nina aparece repentinamente en casa afirmando que se ha convertido al islam, algo que su madre rechaza por completo.
Emilio (Oscar Martínez), su hija Julia (Inma Cuesta) y su nieta Blanca (Mafalda Carbonell) emprenden un viaje disparatado y a la vez revelador. Antes de que a Emilio le falle la memoria definitivamente, la familia le ayudará a buscar al amor de su juventud. En el camino encontrarán la oportunidad de una vida nueva y sin trampas. Decisiones discutibles y contratiempos los llevará a enfrentarse a los engaños sobre los que han montado sus vidas. ¿Será posible vivir dos veces?
Lola (Ludivine Sagnier) tiene dos hermanos: Benoit (Jean-Paul Rouve), que se casa por tercera vez, y Pierre (José Garcia), que llega tarde a la boda… Excusas, reproches, peleas, broncas, cada uno vive su vida a su manera. Benoit va a ser padre sin estar preparado. Lola acaba de conocer a Zoher (Ramzy Bedia) mientras acaba los trámites de su divorcio. Y a Pierre se le complican sus problemas profesionales. Todo parece alejar a estos tres hermanos, aunque en realidad son inseparables.
La larga conversación de dos jóvenes desconocidos le sirve al alemán Hans Weingartner para rodar una “road movie” romántica a la altura de “Antes del amanecer”.
En la pacífica localidad de Centerville pasa algo raro. Los animales se empiezan a comportar de forma extraña, las horas de luz solar cambian de forma impredecible y la luna vigila permanentemente desde el horizonte. Los científicos están preocupados y los informativos dan noticias desconcertantes. Y es que, una extraña invasión está a punto de suceder en la que los muertos ya no está muertos y se levantarán de sus tumbas. Los habitantes de Centerville, liderados por Ronald Peterson y Cliff Robertson, deberán detener esta amenaza y luchar para sobrevivir.