Esta nueva película sobre una institución de monjas para jóvenes “descarriadas” dosifica con habilidad un material pensado para provocar lágrimas, risas e indignación.
La evolución, desde el egoísmo a la generosidad, de un hombre que contrae el sida al principio de la epidemia. Película interesante pero cruda. Oscar al actor protagonista, Matthew McConaughey.
El trabajo del equipo militar que, tras la II Guerra Mundial, se encargó de recuperar obras de arte incautadas por los nazis es un gran tema, pero la película no acaba de aprovecharlo bien.