Ciencia

Piden que los católicos colaboren con organizaciones que no se opongan al derecho a la vida desde la concepción.
Nuevas medidas en China y EE.UU. dan a los gobiernos más instrumentos para vigilar las actividades de los ciudadanos.
Cuando se trata del calentamiento global, el desacuerdo es tratado como herejía, como una creencia perniciosa cuyos defensores deben ser avergonzados, evitados o silenciados
Un neurobiólogo reflexiona sobre el sesgo fisicista que está tomando su especialidad.
En varios hospitales públicos no hay ni un solo médico dispuesto a practicar abortos.
El biólogo norteamericano J. Craig Venter intenta “crear” en su laboratorio un viviente dotado del número mínimo de genes necesario para que haya vida. Este empeño suscita la pregunta de si podemos tratar la vida, aun la no humana, como un objeto más a nuestra disposición.
Una ilustración de las posibilidades y riesgos de la manipulación genética que implican prácticas como la biología sintética se puede encontrar en algo que está sucediendo en la crianza de perros.
El ayuntamiento de Rotterdam ordena el cierre de “coffeeshops” próximos a colegios.
La defensa de la salud y la libertad de la mujer ha sido la bandera tradicional para promover el aborto legal en Occidente. El movimiento pro vida ha sustituido las fotografías sanguinolentas por mensajes amables y comprensivos dirigidos a las madres.
La emigración de personal sanitario agrava la penuria en los países de origen.
La práctica del aborto en España se dispara en jóvenes de 15 a 19 años. En Brasil el gobierno relanza el debate sobre su legalización. Hay quien reclama más píldora del día siguiente o liberalizar el aborto como soluciones, con argumentos que ya se han demostrado equivocados.
El científico que se quejaba de obstáculos políticos a la ciencia cuando la ley no le permitía investigar con embriones, deja ahora el laboratorio para dedicarse a la política como ministro de Sanidad.
En Gran Bretaña las autoridades sanitarias multiplican las campañas publicitarias para que los ciudadanos cuiden la salud. Pero las recomendaciones, cada vez más enérgicas, caen en oídos sordos.

40 años después de legalizarse el aborto, las cifras siguen aumentando, sobre todo entre mujeres jóvenes.

El desbaratamiento de una clínica clandestina y la prisión para dos médicas y una partera por practicar un aborto a una joven de 20 años ha servido para que el aborto se reinstale en la sociedad uruguaya.
El cardenal Renato Martino, presidente del Pontificio Consejo Justicia y Paz, ha anunciado que la Santa Sede retira su apoyo a Amnistía Internacional, por la postura a favor del derecho al aborto que ha adoptado esta organización.

Contenido exclusivo para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.

Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.