En Estados Unidos, como en otros países, se clasifica oficialmente como "pobres" a los que tienen ingresos inferiores a cierto porcentaje de la renta media, límite que varía según el número de miembros de la familia y la zona de residencia (rural o urbana). Según esta definición, la Oficina del Censo de Estados Unidos cuenta más de 30 millones de pobres en todo el país. Robert Rector, analista de la Fundación Heritage, precisa en The Wall Street Journal (24-IX-98) que la mayor parte de esos "pobres" no viven mal.
Tras las crisis asiática y rusa, la huida de capitales hacia lugares más seguros puede hacer más difícil el despegue de los países en desarrollo, reforzando así la división Norte-Sur. Este es el diagnóstico que hace Erik Izraelewicz en Le Monde (2-IX-98).