Adaptación de la serie japonesa de dibujos animados, en la que se ha incluido acción real interpretada por actores de primera fila. Es un buen producto familiar, que exige aceptar el singular planteamiento estético de los Wachowski en esta ocasión.
Adam Brooks dirige una agridulce comedia romántica que arranca con un planteamiento muy sugestivo para seguir después una senda convencional y anodina.
La danesa Susanne Bier (Hermanos, Después de la boda) emprende la aventura americana con un guión de Allan Loeb, cuya temática no se aleja de las constantes de su filmografía.
El veterano Sayles (Lone Star, Passion Fish) recibió el premio al mejor guión en el festival de San Sebastián por esta historia agradable y optimista, quizás excesivamente leve.
El cine sobre corrupción policial está tan visto que es difícil aportar nada nuevo. Esta película se basa en un relato violento y desencantado de James Ellroy (L.A. Confidential, La Dalia Negra).
Ganadora del Festival de cine español de Málaga, esta ópera prima tiene un planteamiento impactante y una buena factura, pero su tono amargo y crudo resulta excesivo.
Angustioso thriller moral producido por Pierce Brosnan y Mel Gibson, que ha dirigido el inglés Mike Barker (A Good Woman). Le pesan los excesos melodramáticos.
Tienen fuerza las tres historias en torno a un científico egipcio residente en Estados Unidos que es acusado de terrorismo; pero las estropea el énfasis en el mensaje político.