Recuerdos de una familia inglesa vive en Bengala, a orillas del Lakya. La autora refleja muy bien el asombro infantil ante la naturaleza y el descubrimiento gozoso de la vida.
La buena disposición, el sentido del humor y la fuerza de los vínculos afectivos son los apoyos argumentales para la variada gama de sucesos cotidianos que componen la acción.