Violento “thriller” de acción, demasiado similar a la saga Bourne, pero que ofrece una factura visual y una progresión dramática bastante por encima de la media.
Uma Thurman es una asesina que, el día de su boda, es atacada por los miembros de la banda de su jefe, Bill (David Carradine). Logra sobrevivir al ataque, aunque queda en coma. Cinco años después despierta con un trozo de metal en la cabeza y un gran deseo de venganza en su corazón.
Londres es un cementerio. Las calles están ahora desiertas. Reina un silencio total. Tras la propagación de un virus que acabó con la mayor parte de la población, tuvo lugar la invasión de unos seres terroríficos. El virus se difundió, tras la incursión en un laboratorio, de un grupo de defensores de los derechos de los animales. Transmitido por la sangre, el virus produce efectos devastadores. En 28 días la epidemia se extiende por todo el país y sólo queda un puñado de supervivientes...