Víctor Erice culmina su filmografía con una obra maestra en la que, mediante una trama de intriga, plantea una profunda y bella reflexión sobre la identidad, la memoria y la trascendencia.
Jaume Balagueró, director de películas de terror, entra en el terreno clásico del “thriller” y realiza sin problemas ni pretensiones un entretenido y muy clásico “robo imposible”.
La película cumple el objetivo de ilustrar un período clave de la historia de España: el pulso entre Felipe el Hermoso y Fernando el Católico, tras morir Isabel.
La historia del atraco a un banco sirve de punto de partida a este ameno “thriller”, que puede ser una de las películas españolas más populares del año.