La historia de dos jóvenes españoles que emigran a Alemania en busca de trabajo tenía base para una buena comedia dramática, pero se queda en una exhibición de humor basto.
Decepcionante regreso de Almodóvar a la comedia con una historia sin ritmo que se reduce a una colección de chistes pasados dentro de un avión averiado en busca de un aeropuerto donde aterrizar.
Alrededor de una compañía de vodevil en la posguerra española se urde un argumento compuesto de diversos elementos mezclados, que ni resulta creíble ni emociona.