El premio Planeta de este año es una novela más de la serie protagonizada por los guardias civiles Bevilacqua y Chamorro, que esta vez afrontan una investigación compleja en el actual clima de crisis económica.
Ambientada en la inmediata posguerra española, con un largo intermedio en el frente de Rusia, la novela cuenta la vida de un hombre que para salir adelante acepta los beneficios de la mentira y el fraude.
Goyen demuestra la solidez de su poco convencional literatura con estos relatos ambientados en la Texas rural de su infancia, y con el telón de fondo de lo onírico y de la vuelta al hogar como redención.
En esta novela inspirada en la Guerra de la Independencia israelí de 1948, Kaniuk, que participó como soldado, ofrece una imagen crítica del desarrollo de la guerra.
En clave novelesca, Trapiello hace ver cómo la Guerra Civil sigue despertando en la sociedad española rencores y divisiones, un enrarecido contexto en el que resulta imposible describir la verdad.
Kadaré mezcla la situación política y social de los años de la tiranía comunista y el ambiente en que se movían los escritores con las leyendas albanesas y su relación con la mitología griega.
Regresa Javier Cercas a la ficción con una novela ambientada en la España de finales de los setenta, la de las bandas de quinquis que pasaron a formar parte de la mitología popular.
Novela que se inspira en la biografía de la escritora norteamericana Pearl S. Buck, quien convirtió el mundo de los campesinos de China en el argumento de sus mejores novelas.
Publicada por primera vez en Estados Unidos en 1942, esta historia ambientada en la ocupación de Praga durante la Segunda Guerra Mundial es una de las primeras obras en torno a la barbarie nazi.
Novela dedicada en exclusiva a uno de los personajes más característicos de Elmore Leonard, Raylan Givens, un duro policía y guardián de la ley. El libro lo componen cuatro conflictos entrelazados.
Escrita en 1960, se trata de una de las primeras obras de Muriel Spark que ya contiene las características de esta autora: ironía, finísimo humor y una dosis de suave tensión que se mantiene hasta el final.
Único libro en gaélico irlandés que publicó Liam O’Flaherty. En estos relatos viaja a la Irlanda rural, salvaje y pobre, en la que la vida de las personas y los animales se confunde en un paisaje tan duro como opresivo.