Comedia bufa sobre el exilio de Napoleón en la isla de Elba que no encuentra el tono adecuado para satisfacer a un espectador atraído por el brillo del reparto.
Candidato al Oscar, esta impactante cinta animada se asoma a los recuerdos fragmentarios de un grupo de soldados israelíes, 25 años después de su participación en la invasión del Líbano.
Tres hermanos judíos escapan de Polonia tras la ocupación alemana y se ocultan en los bosques de Bielorrusia. Notable película, de intenso sabor clásico y con excelentes interpretaciones.
Flame y Citron son los nombres de guerra de dos miembros de la resistencia danesa contra la ocupación nazi. A partir de sus vidas la película plantea cuestiones de mayor calado.
El ruso Sergei Bodrov aspiró al Oscar con esta película kazaja sobre la juventud de Genghis Khan, el príncipe mongol que logró unir a su pueblo y convertirlo en dueño de uno de los imperios más extensos de la historia.
Vigorosa película que no ha necesitado el despliegue de medios de El pianista de Polanski para transmitir el mismo mensaje, fuerte y humano, sin concesiones y sin maniqueísmos.
Estremecedora y poliédrica película del húngaro Lajos Koltai con guión del premio nobel Imre Kertész, que ha adaptado su novela homónima. El protagonista es un chico judío de 14 años que experimenta la tragedia de los campos de exterminio nazis.
Tras “Banderas de nuestros padres”, Clint Eastwood muestra la misma batalla desde el lado japonés. Las dos películas forman un solo proyecto sobre la guerra, la naturaleza humana y el heroísmo.