El triángulo amoroso con el poeta Dylan Thomas ofrecía un planteamiento sólido; pero un guión errático, que va pasando por distintos géneros, torna la historia increíble.
Chicas adolescentes desenvueltas, treintañeros inmaduros y compulsivamente infieles, sexo y sentimentalismo a espuertas, argumento insustancial, con buena interpretación y brillante envoltorio de fotografía y música.
El caso de Neal McDonough, despedido por no querer interpretar una escena de sexo, permite preguntarse sobre la representación del sexo y la violencia en la pantalla.
Con la historia de un antiguo pistolero unionista del Ulster sirve para que el magnífico guión ponga sobre el tapete muchas de las cuestiones que se plantean en el debate actual sobre el terrorismo.
Tim Burton adapta los dos libros de Carroll de manera muy fiel a los originales, pero añadiendo acción y un inteligente uso de las imágenes en tres dimensiones.
El director de Chicago lleva al cine el musical de Broadway inspirado en la película 8½ de Federico Fellini. Soberbias interpretaciones de Day-Lewis y Cotillard en un musical muy básico e innecesariamente cabaretero.
La película plantea un tema original e interesante a propósito de los “bebés medicamento”, pero el director lo desperdicia cargando la mano en los sentimientos y renunciando a la reflexión.