Concebida como un experimento literario, la novela se centra en la vida de un prestigioso historiador que no tiene una cómoda relación ni con sus hijas ni con sus yernos.
Este relato, uno de los más famosos de Willa Cather, reflexiona sobre la fascinación del mundo del arte y los artistas en un joven con una exquisita y epidérmica sensibilidad.
La vida de Lucy Gayhearte le sirve a Cather para reflexionar sobre los temas más importantes que preocupan al ser humano -el amor, el destino- y plantear de nuevo el contraste entre la vida rural y la de la ciudad, con su peculiar.