El Tribunal Constitucional confirma que un embrión creado mediante fecundación artificial solo puede ser destinado a la gestación, como establece la ley vigente.
El Dr. Jacques Testart advierte que poner las técnicas de reproducción asistida al servicio de los deseos, sin justificación terapéutica, abre una escalada que conduce a la eugenesia.
En una columna en El País, el filósofo Fernando Savater critica la idea de alcanzar artificialmente la paternidad privando al hijo del otro progenitor.
Se extiende la transferencia de embriones congelados a parejas que no pueden tener hijos, aunque no es muy efectiva ni da solución a los millones de embriones que aguardan indefinidamente.
Recientes decisiones judiciales en Francia y Reino Unido sobre los derechos parentales de parejas homosexuales, ilustran cómo ciertos reclamos de este colectivo traen consecuencias inesperadas.
El biólogo francés Jacques Testart hace una llamada de atención ante el recurso a la fecundación artificial para resolver problemas no médicos o con fines eugenésicos.
Dos testimonios ponen voz y rostro a otros protagonistas de la fecundación artificial: los nacidos por donación de gametos y las mujeres que no lograron concebir tras años de tratamientos.
Las restricciones económicas en el Sistema Nacional de Salud han obligado a dejar de financiar tratamientos de reproducción asistida que no responden a una patología.
El riesgo de deficiencias congénitas se multiplica por 1,25, mientras que entre el 17% y el 45% de las mujeres que recurren a la técnica conciben después de forma natural.
Una de las posibles consecuencias de los recortes presupuestarios es una mayor restricción en el acceso a la reproducción asistida financiada por la sanidad pública. Los profesionales del sector defienden la importancia de su actividad, en la que hay también muchos intereses comerciales.
Un estudio publicado en el New England Journal of Medicine analiza en detalle la presencia de riesgos de defectos congénitos en los bebés nacidos por técnicas de reproducción asistida.