The Visitor

TÍTULO ORIGINAL The Visitor

PRODUCCIÓN Estados Unidos - 2007

DURACIÓN 104 min.

DIRECCIÓN

GÉNEROS, ,

PÚBLICOJóvenes

ESTRENO07/09/2007

Walter es un profesor universitario de vida gris. Solitario y egoísta, su anquilosada existencia sufre un vuelco cuando el decano le obliga a acudir a Nueva York, a presentar un artículo de una compañera, de baja maternal. Y en su apartamento en la Gran Manzana se lleva una sorpresa. Una pareja de inmigrantes -Tarek, sirio, y Zaineb, senegalesa- vive allí: un desaprensivo les alquiló el lugar sin contar con el dueño. Aclarada la situación, Walter romperá su “burbuja”, y les permitirá quedarse un par de días. Es el comienzo de una singular relación, que permitirá saber por qué Walter se ha convertido en el hombre que es, y la medicina para curarle de su triste estado.

Extraordinaria película del actor reconvertido a director y guionista Thomas McCarthy, quien ya sorprendió en Vías cruzadas. Aquí sigue por los mismos raíles, nunca mejor dicho, forjados para ese film. El cineasta demuestra talento para crear tipos humanos memorables, y las situaciones dramáticas emocionan y resultan creíbles. McCarthy ha madurado aún más, pues sabe dosificar la narración, no nos entrega todos los datos de sus personajes enseguida, sino que los da en el momento justo. Y no sólo es un estupendo director de actores: además se revela como magnífico constructor de escenas, todas muy bien resueltas.

Es sorprendente cómo se va desplegando la rica historia. Lo que parece un simple “viaje” de transformación del protagonista -genial Richard Jenkins, nominado al Oscar por el papel de su vida-, donde tiene peso principal la amistad, permite indagar en el drama de la inmigración. De esta forma, se ofrecen consideraciones sutiles sobre la sociedad estadounidense, que alimenta el miedo al recién llegado, a la vez que ignora casi todo lo que no tiene que ver con su país.

E, inesperadamente, como extraída por arte de birlibirloque de su chistera de mago-cineasta, McCarthy nos entrega una historia de amor capaz de emocionar al espectador más frío, donde tiene enorme presencia la gran protagonista de Los limoneros, Hiam Abbass. Además, McCarthy sabe sacar partido a los bongos que maneja Tarek, y que son como el detonante que lleva a Walter a abrirse definitivamente a los otros, sin tasa.

Contenido exclusivo para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.

Funcionalidad exclusiva para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta para poder comentar. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.