Esta agradable pero corrientita dramedia está bien para pasar el rato, pero no merece tantas candidaturas a los Oscar. Al final se llevó solo el de actriz principal, para Jennifer Lawrence.
Nominada al Oscar a mejor película, cuenta la historia de una niña que malvive con su padre alcohólico en un barrio de Nueva Orleans casi sumergido tras el huracán Katrina.
El chileno Pablo Larraín aspira al Oscar con este interesante drama que narra la campaña por el no en el referéndum que supuso el fin del régimen de Pinochet.
Un piloto con muchos problemas personales es sometido a investigación tras un accidentado vuelo. El guion se centra en el proceso más que en el drama interior del protagonista.
El deterioro físico de una anciana a la que cuida su marido muestra la belleza del amor y la grandeza tierna de la vejez, pero Hanecke pone todo al servicio de una tesis nihilista que recusa la vida cuando aparece el sufrimiento.
Unos montoneros argentinos regresan del exilio con sus hijos. Intenso e interesante drama que abusa de los subrayados sensibleros y del tono ideológico.
Un amable homenaje a los videojuegos, con un planteamiento similar al de "Toy Story": los personajes de las consolas tienen vida propia cuando no están los humanos.
En torno a un adicto al sexo y al alcohol que es atraído a una secta, se teje un opresivo relato que quiere ofrecer una reflexión sobre líderes seudorreligiosos.