A medio camino entre el diario y el ensayo, el autor reivindica la vuelta a lo sencillo e inmediato como antídoto contra una vida de ambiciones extremas y vacías exhibiciones.
Tras la muerte de su padre, el narrador regresa a la casa paterna para hacerse cargo de un predio heredado en Soria y contar la historia de quienes vivieron allí.
La tendencia de despojar a la narrativa para niños de sus conflictos y mitos tradicionales puede acabar perjudicando su capacidad para analizar la realidad y asumir valores positivos.