Una película ambientada en un futuro inquietantemente próximo en el que la inteligencia artificial tiene un enorme protagonismo en la vida del planeta Tierra.
La primera película de la Marvel protagonizada por una superheroína, es una digno filme de entretenimiento… lejos del brillo de las mejores cintas de la franquicia.
A pesar de ciertas concesiones a lo políticamente correcto, la película convence por las extraordinarias interpretaciones y por no caer en anacronismos.