Burke ofrece una buena síntesis histórica sobre la forma en que los hombres han adquirido conocimientos desde la Enciclopedia ilustrada hasta la irrupción de Wikipedia.
Pese a que no se conocen muchos datos biográficos de Velázquez, Bennassar relata los principales hechos de la vida del pintor y descubre aspectos interesantes de su faceta humana.
La creencia religiosa puede servir para fomentar la creatividad y la investigación científica, como ocurrió en el desarrollo ruso de la teoría de conjuntos, cuya historia explica este libro.
Sam Leith explica, con ejemplos y de una manera amena, las reglas retóricas básicas y examina por qué resultan tan importantes en el ámbito político o publicitario.
Durante décadas la teoría pedagógica de moda ha repetido que lo importante es el proceso de aprendizaje, más que los contenidos concretos. E.D. Hirsch discute estas ideas y ha impulsado un movimiento hoy seguido por centenares de escuelas norteamericanas.
Ofrecer argumentos y respuestas sobre la validez del catolicismo para el hombre de hoy es el objetivo de algunos libros de los últimos años, que conectan con el propósito del Año de la Fe.
Antonio Núñez replantea en este libro la formación de los directivos públicos, advirtiendo de las similitudes entre ellos y los directivos del ámbito privado.
Para Sánchez Cámara, el principal problema de Europa es moral y cultural y no económico, por lo que urge volver a las fuentes grecorromanas y cristianas con el fin de regenerar la civilización europea.
El prestigioso hispanista británico repasa su vida intelectual y ofrece reflexiones sobre la labor del historiador y sobre algunos problemas contemporáneos.
Frente al reto de la mentalidad cientificista, hay pensadores para quienes la existencia de Dios se revela como una hipótesis más “razonable” que el ateísmo.