En su documental más íntimo, Ignasi Guerrero emprende un viaje interior para homenajear a su hijo Pep: su vida, su muerte y todo lo que enseñó en tan poco tiempo a su familia.
Este interesante “thriller” plantea de forma eficaz, aunque sin respuestas muy profundas u originales, el debate cada vez menos ficticio de si la IA impartiría justicia mejor que los humanos.