Director: Michel Boujenah. Guión: Edmond Bensimon. Intérpretes: Philippe Noiret, Charles Berling, Bruno Putzulu, Pascal Elbé. 95 min. Jóvenes-adultos.
Philip Noiret encarna a Leo, un hombre jubilado con tres hijos: uno es un próspero y estirado empresario; otro es el prototipo de perdedor y está en el paro; y el tercero es un despreocupado vividor. Como familia, son un desastre: no se ven, ni se hablan, ni parecen apreciarse. En una de las raras reuniones familiares, Leo tiene un ligero malestar y lo aprovecha para urdir un plan que pueda unir a la familia: anuncia a sus hijos que se está muriendo, pero que tal vez haya una posibilidad de escapar a la operación y retrasar la muerte. Ese será el arranque de un largo viaje de los cuatro a Quebec, en el que la familia tendrá ocasión de discutir, explicarse, hacer las paces, pelearse otra vez y descubrir que se quieren entrañablemente.
La película depara pocas sorpresas, pero está muy bien interpretada y tiene un gran equilibrio y delicadeza. Un agradable entretenimiento, con una visión muy positiva de las relaciones familiares.
Fernando Gil-Delgado