Director: Alain Tanner. Guión: Alain Tanner y Bernard Comment. Intérpretes: Jerome Robart, Aïssa Maïga, Natalia Dontcheva, Jean-Pierre Gos, Cécile Tanner. 124 min. Adultos, con reparos.
En 1976, el discutido cineasta suizo Alain Tanner realizó Jonás, que cumplirá los 25 en el año 2000, su film más emblemático. Con la llegada de ese año ha filmado una continuación, Jonás y Lila, con un joven Jonás que, por la edad, podría ser el mismo de la película anterior.
Tanner retrata a una joven pareja que tiene que abrirse camino a comienzos del milenio. Él es cineasta en paro; ella -africana adoptada por un suizo-, dependienta en una tienda de discos. Durante 60 escenas fragmentadas vemos a los protagonistas en diferentes contextos, a menudo en la cama. Este mosaico solo refleja el profundo vacío existencial de Alain Tanner, quien hace veinticinco años se quejaba de la engañifa de mayo del 68, y que ahora se queja de que no haya nuevos ideales por los que valga la pena luchar. A falta de otra cosa, Jonás se obsesionará con el ecologismo y la contaminación del planeta.
Discursiva, pretenciosa y, a pesar de algún destello, muy aburrida.
Fernando Gil-Delgado