Director: Henry Bean. Guión: Henry Bean y Mark Jacobson. Intérpretes: Ryan Gosling, Summer Phoenix, Glenn Fitzgerald, Billy Zane, Theresa Russell. 98 min. Adultos.
Esta opera prima combina la violencia más atroz con la reflexión más refinada. Dirigida y escrita por el escritor y guionista Henry Bean, cuenta la historia de Danny, un joven judío que reniega de su religión y de su raza, y termina en el neonazismo más antisemita. El reencuentro con su pasado le hará cuestionarse esas convicciones.
El guión falla en la construcción del protagonista, cuyas motivaciones no se aclaran. Sin embargo, resulta brillante su apologética discursiva, que trata de encontrar en las supuestas inconsistencias de la religión hebrea la explicación del antisemitismo. Políticamente incorrecta, probablemente antisionista, desemboca en un nihilismo que parece negar la trascendencia.
Henry Bean se basa en hechos reales para hablar de las graves contradicciones a que conducen las ideologías radicales. Las relaciones entre amor y odio, entre religión y razón soportan este film muy bien interpretado, algo excesivo en sus pasajes violentos y que al menos propone argumentos sobre los que pensar.
Juan Orellana