Si no la firma Pixar, no esperas casi nada de una versión para público amplio (niños pero también adultos) de un cuento tradicional compendiado por los Grimm y conocido universalmente. El último fiasco fue la Caperucita Roja de Catherine Hardwicke. Esta Blancanieves es, sorprendentemente, una película de notable alto: divertida, bien escrita, bien interpretada y con una gran fuerza visual. Dice Bernie Goldmann, uno de los productores, que se propusieron “hacer una Blancanieves en versión real que tuviera el sentimiento, la talla y alcance de una película de animación”. Y este es uno de los grandes aciertos de una cinta que, en ningún momento, pierde ni el ritmo, ni el sentido del humor prop ...

Contenido para suscriptores

Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.

Léelo accediendo durante 15 días gratis a Aceprensa.

Contenido exclusivo para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.

Funcionalidad exclusiva para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta para poder comentar. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.