Como las anteriores entregas de la saga, es un festival de persecuciones y peleas hiperviolentas, no apto para paladares delicados, pero también muy entretenido y a veces hasta divertido.
Padre e hijo, náufragos en la Tierra tras el accidente de su nave espacial, tienen que aprender a confiar uno en otro para sobrevivir. Película convencional, pero bella y positiva.