Película sórdida y violenta, ambientada en la Nueva York de los años sesenta, en torno a dos antagonistas: un policía y un gangster dedicado al narcotráfico.
Los hermanos Ridley y Tony Scott producen esta poderosa y descarnada película sobre la muerte del legendario forajido según el relato del novelista Ron Hansen. Brad Pitt y Casey Affleck realizan unas interpretaciones memorables.