Taika Waititi

Nueva entrega de las aventuras de Thor: entretenida y gamberra, pero no una gran película.
Una historia basada en un videojuego con suficiente esqueleto como para sostener una trama entretenida con momentos muy divertidos.
Una parodia del nazismo que no banaliza, sino que más bien desenmascara la ideología nazi, y que se centra además en el amor de una madre por su hijo.
Gran remate de “Infinity War”, las tres horas de duración permiten alternar historias personales y gran épica, cerrar muchos relatos y dejar la puerta abierta a otros nuevos.
Al ritmo y a la acción acostumbradas de la saga, esta tercera entrega añade un giro a la comedia disparatada, sin renunciar a las reflexiones shakesperianas.
Otro superhéroe de cómic llevado a la pantalla grande, con gran espectáculo visual y una historia que solo seguirán bien los conocedores del original.

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