Ruby in ParadiseDirector: Víctor Núñez. Intérpretes: Ashley Judd, Todd Field, Allison Dean.
Realizada en 1993, ha obtenido premios en los festivales de Sundance, Cannes y San Sebastián; premios marginales, que no compiten con la comercialidad. La historia del trabajo de Víctor Núñez parece dura: en 1979, Gal Young Un y en 1985, A Flash of Green. Nada más. Y en ese intervalo, buscar productor, desalentarse, o dar clases.
Escribe los guiones sobre lo que ha vivido, lo que da un peculiar toque de autenticidad a su obra. Nacido en Florida, elige como lugar para su historia una playa de allí, Panama City Beach, donde veraneó con su familia.
Es otoño, y llega, como arrancada por el viento, desde las nevadas montañas de Tennessee, una chica sola que huye; no sabremos si de su familia, o del frío, o de un amante…; o quizá busca algo. Ése es el hilo de su vida: el desarraigo, y la búsqueda inútil de un sentido, porque Ruby no sabe siquiera qué preguntar.
Ruby es suave y fuerte. Encuentra trabajo, lo pierde, vuelve a encontrarlo…, tiene amigas, y amantes… Siempre sola, rechaza incluso su educación familiar, sin duda religiosa: no quiere creer en una promesa futura; quiere un goce sólo de aquí.
Escribe en un cuaderno su diario desconcierto, su soportable angustia, mientras desciende poco a poco hacia el aturdimiento común, la sordera masiva…: entra, como quien se hunde, en la materialidad más opresiva; se convierte en un objeto más de los muchos que ruedan, se compran, se consumen…, y lo acepta.
La escritura es clara; la pausa permite la contemplación; une la eficacia de la elipsis, la brevedad del ritmo o el montaje rápidos. No es sólo una crítica a la sociedad actual, o un retrato psicológico; es más: el terrible declinar de un mundo que no distingue el bien del mal, que se ahoga y no lo sabe, o no le importa.
Pedro Antonio Urbina