Al éxito del Karate Kid de 1984 le siguieron tres secuelas, un remake, una serie… y ahora, una nueva entrega que repite la fórmula. Pero bendita repetición: en sus 94 minutos, Karate Kid: Legends ofrece humor, emoción, patadas espectaculares y ese sabor a nostalgia que tanto gusta.
Li Fong, joven experto en kung fu, llega a Chinatown con su madre, una doctora contratada en un hospital local. Allí conoce a Mia y, aunque evita a toda costa cualquier conflicto, acaba enfrentado a Connor Day, prodigio del kárate y ex novio de Mia.
La historia –sencilla y predecible, aunque con alguna sorpresa– es como un eco moderno de la cinta de los 80. Captando muy bien su esencia, tiene corazón, optimismo y un mensaje positivo: la fuerza está en el dominio …
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