Las consecuencias políticas del matrimonio entre una mujer inglesa y el heredero al trono de un país africano son el conflicto de este drama romántico.
La saga concluye con una buena película, claramente mejor que la anterior, en que los recursos técnicos y estéticos ya no sorprenden, pero la historia está contada con gran fuerza.
Continúan las aventuras de un Harry Potter crecido que se enfrenta al maligno Voldemort en una película de buen nivel, con menos acción y fantasía que las precedentes, pero con más tensión y dramatismo.