Toda limitación a la libertad de expresión, señala la sentencia, debe responder a un claro interés público y estar estrictamente definida para servir a tal interés
El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha dictaminado que no se puede prohibir la venta de videojuegos violentos a menores de edad. Tales contenidos, dice, están protegidos por la Primera Enmienda (libertad de expresión), y los poderes públicos solo pueden regularlos bajo estrictas condiciones. De igual modo habían concluido los tribunales inferiores, que también se pronunciaron contra la ley.
La sentencia, del pasado 27 de junio, anula una ley californiana que imponía multas de hasta mil dólares a los ...
Contenido para suscriptores
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
Léelo accediendo durante 15 días gratis a Aceprensa.