Un nuevo arroz trasgénico resiste la falta de agua y el exceso de sal

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El arroz es el alimento base para un tercio de la humanidad: sobre todo, los habitantes de Asia, el continente más poblado, y buena parte de África, el continente más pobre. La «revolución verde» aseguró las necesidades de la población asiática; pero en África la productividad de los arrozales no ha experimentado una revolución comparable, entre otras razones porque allí el agua es más escasa. Pero, según informa la revista norteamericana Proceedings of the National Academy of Sciences (10-XII-2002), científicos de Estados Unidos y Corea han logrado un arroz trasgénico muy resistente a la sequía y a la alta salinidad, otro problema común de los lugares donde no abundan las lluvias.

El logro es obra de un equipo de investigadores dirigido por Ray Wu, de la Universidad de Cornell (Estados Unidos), en el que han participado especialistas de dos universidades surcoreanas, la de Myongji y la de Seúl. Las propiedades del nuevo arroz se deben a la trehalosa, sustancia que presta resistencia a condiciones ambientales adversas como falta de agua, exceso de sal, frío o calor. La trehalosa está presente en bacterias, hongos e insectos, pero es muy poco común en las plantas. Mediante manipulación genética, el equipo de Wu ha conseguido que el arroz basmati (variedad común en la India) produzca esa sustancia.

Los científicos tomaron de la bacteria Escherichia coli (abundante en el intestino humano) los dos genes que permiten sintetizar sendas enzimas necesarias para producir trehalosa. Después combinaron los dos genes en uno solo y lo transfirieron al arroz. Además, han logrado que el gen se active solo cuando las condiciones ambientales lo requieren, a diferencia de experimentos anteriores, que fracasaron porque la trehalosa arruina los cultivos si se sintetiza de modo continuo. Las pruebas de laboratorio muestran que el nuevo arroz trasgénico produce trehalosa y, por tanto, prospera, cuando hay falta de agua o exceso de sal, lo que en cambio detiene el crecimiento del basmati natural.

La misma técnica se podría aplicar a otros cultivos, como el maíz o el trigo. Pero faltan todavía los estudios de campo para comprobar el rendimiento del nuevo arroz en cultivo. Otro arroz trasgénico, de alto rendimiento, logrado hace tres años, sigue aún en fase de ensayo (cfr. servicio 54/00).

Más recientemente, y con un método distinto, se consiguió un tomate trasgénico resistente a la alta salinidad; se espera que la técnica se pueda aplicar a otros cultivos (cfr. servicio 125/01). Y el arroz Nerica, obtenido sin ingeniería genética, mediante cruces, que soporta muy bien la escasez de agua, ya se ha empezado a cultivar en África occidental (cfr. servicio 63/01).

El mapa genético del arroz, culminado el pasado año, promete ulteriores adelantos. En abril, Science publicó el borrador del genoma de las variedades índica y japónica, y en diciembre un consorcio internacional de investigadores completó la secuencia de la segunda.

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