De La guerra no tiene rostro de mujer existen dos versiones. En la segunda, de 2013, la autora añadió pasajes borrados por ella misma y otros suprimidos por la censura. De 1978 a 1983 fue recogiendo testimonios de cientos de mujeres soviéticas de las más de un millón que participaron en la II Guerra Mundial, pero el libro fue rechazado en 1983 porque no se percibía “el papel dominante y dirigente del Partido Comunista”. En 1985, en plena perestroika, pudo
Suscripción
Contenido Oculto
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
AccederSuscripción