El autor evita el maniqueísmo con una historia de solidaridad y amistad que tiene como trasfondo la supervivencia de un grupo de españoles en un gulag en la Unión Soviética.
Con mucha ironía, Ugrešić disecciona algunos automatismos de la cultura norteamericana desde su perpleja mirada de exiliada por la Guerra de los Balcanes.
En estas notas publicadas póstumamente, el ex portavoz de la Santa Sede aporta numerosos detalles sobre la rica personalidad del Papa polaco y sobre algunos acontecimientos de su pontificado.
Tras vivir la Revolución comunista en su país, Azerbaiyán, que contó en “Los días del Cáucaso”, la autora continúa sus memorias con su exilio en París en los años veinte.