Pre-Textos. Valencia (2004). 97 págs. 13 €. Traducción: César Palma.
Mario Rigoni Stern (1921) es un autor italiano que siempre ha permanecido ligado a su pueblo natal, Asiago, aunque la II Guerra Mundial le llevó al frente de Rusia. Tras la retirada de 1943, a pesar de permanecer dos años como prisionero en un campo de concentración alemán, Rigoni pudo regresar a Italia. Precisamente estas vivencias de los años de guerra, junto con su amor a la naturaleza, constituyen los motivos de toda su obra narrativa.
La novela narra la historia de Tönle Bintarn, un pastor véneto que vive en las montañas fronterizas entre Italia y el Imperio Austro-Húngaro desde finales del siglo XIX hasta después de la Gran Guerra. Dedicado en su juventud al pequeño contrabando, su encuentro con una patrulla de guardias fronterizos del emperador Francisco José va a marcar su vida, pues se verá obligado a emigrar por media Europa e invernar a escondidas en su propia aldea. Más tarde, cuando ya es un hombre bregado por la vida y consigue el indulto, las sombras de la I Guerra Mundial seguirán protagonizando la vida de aquellas alejadas aldeas montañesas, y Tönle será el personaje conductor de la crónica de aquellos años.
La novela tiene escaso argumento. Pero se trata de un relato sereno, en cierto modo bucólico, que deleita con los entresijos más sencillos y complacientes de una vida al natural, alejada de las ciudades donde se forjan las ambiciones e incomprensiones que desembocarán en la Gran Guerra. Ésta acabará por llegar con sus cañones y sus temibles aeroplanos, para también destruir la apacible vida de aquellos tranquilos y felices montañeses. El amor a la naturaleza, al trabajo, a las fiestas tradicionales y al calor del hogar se contraponen a esa otra realidad terrible de las deportaciones, del aparato militar y de la destrucción.
Ángel García Prieto