Un buen literato suele ser el que logra plasmar lo universal de la conducta humana en lo particular, a través de una trama, unos lugares y unos personajes bien determinados. En la primera mitad del siglo pasado, sucedieron acontecimientos de un dramatismo como probablemente no se habían dado antes en la historia de la humanidad: dos guerra mundiales, la revolución comunista, el nazismo… Centroeuropa fue uno de los escenarios más castigados por aquellos males. Esta novela, iniciada por el autor
Suscripción
Contenido Oculto
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
AccederSuscripción