Dos adolescentes, Mark y Margaret, viven cada uno en un bucle temporal, en un día interminable al que quieren buscarle los instantes más significativos.
Clint Eastwood retrata al primer director de FBI en una película en la que el guión no está a la altura del mismo realizador ni de los excelentes intérpretes, Leonardo Di Caprio y Naomi Watts.
El director británico de American Beauty y Revolutionary Road sigue con sus películas sobre las relaciones familiares, esta vez con un tono más optimista.