Diego Martín

Un buen “remake” español de una divertidísima comedia argentina
El enredo que se organiza en un matrimonio que se está divorciando cuando al marido le toca la lotería, nos va llevando por una trama ingeniosa y amena.
Película que capta la vida en su complejidad, y sabe extraer de la anécdota minúscula una enseñanza universal.
Actores conocidos de la televisión, toneladas de sentimentalismo epidérmico y bastante sexo.
De la famosa novela para adolescentes, el director español ha hecho una película para adultos, que no se interesarán por el romance juvenil.
Alrededor de una compañía de vodevil en la posguerra española se urde un argumento compuesto de diversos elementos mezclados, que ni resulta creíble ni emociona.

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