¿Qué pensar de una escuela secundaria cuyos alumnos -todos de familias modestas- deben trabajar un día a la semana en una empresa, que paga a la escuela por ese trabajo, mientras los alumnos han de dedicar más horas y tener menos vacaciones para completar sus estudios? En España, la escuela habría sido denunciada por explotación del trabajo infantil y probablemente clausurada por el Ministerio de Educación, con el aplauso de los sindicatos. En EE.UU., una red escolar de este estilo,
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