La historiadora y traductora María Belmonte (Bilbao, 1953) es autora de tres libros de viajes: Peregrinos de la belleza (2009), Viajeros por Italia y Grecia (2015), Los senderos del mar (2017). Como se aprecia en ellos, conoce bien las tierras de Grecia, de las que parece verdaderamente enamorada, y tiene una gran sensibilidad y enorme conocimiento de la cultura y la historia clásicas.
Lo mismo sucede en su último libro, En tierra de Dioniso. Vagabundeos por el norte de Grecia: una bella, interesante y valiosa lectura para asomarse, vivir o revivir lo que el lector conozca de Macedonia, nudo de comunicaciones, confluencia de geografías y tierra que ve nacer imperios y consolidar culturas y artes.
El relato recoge paseos, estancias en hoteles rurales, visitas y conversaciones con lugareños, vivencias íntimas que el eco de los paisajes, las cosas y las situaciones evocan en el alma de esta autora culta y conocedora de la geografía, la historia y las biografías de Aristóteles, Eurípides, Alejandro Magno y otros personajes relacionados con los lugares visitados.
Belmonte maneja también con maestría el conocimiento de la arquitectura y las artes decorativas presentes en el Olimpo, el Monte Atos o la ciudad de Pela, centro del antiguo reino de Macedonia; en Tesalónica o Salónica, gran núcleo urbano que vivió como capital los cambios históricos de griegos, romanos y bizantinos… En su afán de ensalzar la cultura clásica, deja caer algunos comentarios negativos sobre la posterior influencia del cristianismo.
En su conjunto, el libro resulta literariamente impecable, muy enriquecedor, entretenido, emotivo… y en él se cumple lo que la propia autora escribe en el epílogo: “Las ciudades son de quien las ama”.