Norman, un chico de 16 años, cree fervientemente en los extraterrestres. Pero no imagina que una nave entera se “cuele” por una emergencia dentro de su cuerpo. En ella van el veterano Max, Gus y Sophie, del equipo de Fuerzas de Protección Espacial. Los tres luchan contra el maligno Zolthard, el villano intergaláctico que intenta gobernar la Tierra y que, igualmente, acabará en la cabeza de la directora del instituto de Norman, y de otros dos profesores.
El guion –que recuerda a la saga de La Guerra de las Galaxias– parte de una idea imaginativa, y la estética y los efectos especiales están muy cuidados. Los más pequeños disfrutarán de una película original donde el bien gana al mal, la maldad es evidente y los buenos se unen. Para los adultos, la cinta resulta reiterativa y probablemente pensarán –al menos ha sido mi caso– que quizás no sea una gran idea que todos los profesores y adultos “humanos”, o bien formen parte de los malos, o bien sean torpes y poco cuerdos.