Los partidos euroescépticos vuelven a estar de moda. Más que una ideología, los unen ciertos métodos: simplificación de la propuesta política a uno o dos temas y retórica populista. Ambas características explican su repentino éxito, pero también sus bruscas caídas.
Según algunos sondeos recientes, el euroescepticismo es un fenómeno en alza en muchos países del Viejo Continente. A los tradicionalmente remisos a la Unión Europea, se están uniendo otros que anteriormente habían mostrado una adhesión entusiasta. La crisis económica tiene mucho que ver con este cambio: en todos los países que la están sufriendo más duramente, el euroescepticismo ha prendido con mucha fuerza, al menos en la opinió ...
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