Sus destellos de belleza y emoción justifican este audaz experimento de Robert Zemeckis, cuyas leves tramas dramáticas se entrecruzan dentro y alrededor de un único encuadre fijo.
Dexter Fletcher (“Amanece en Edimburgo”) dirige un “biopic” de Elton John, oscuro en el tratamiento del personaje y absolutamente deslumbrante en el apartado musical.