Venganza, odio, codicia y un absoluto desprecio por la vida son los ingredientes de este macabro “western” que tiene mucho de tragedia griega en clave cómica, al estilo Tarantino.
Uma Thurman es una asesina que, el día de su boda, es atacada por los miembros de la banda de su jefe, Bill (David Carradine). Logra sobrevivir al ataque, aunque queda en coma. Cinco años después despierta con un trozo de metal en la cabeza y un gran deseo de venganza en su corazón.