Pequeña coproducción hispano-francesa que retrata la vida de emigrantes españolas que trabajan como empleadas domésticas en el París de los años sesenta.
En plena postguerra, Pepita (María León), una joven cordobesa, abandona su aldea y viaja a Madrid para estar cerca de su hermana Hortensia (Inma Cuesta) que está embarazada y en prisión.