Reediciones de dos buenos libros infantiles de la veterana escritora Ana María Matute, con un tono cálido capaz de devolver a los lectores a los sentimientos propios de la niñez.
La última entrega de la octogenaria Ana María Matute consiste en una rememoración de la infancia de la que no sabemos la proporción exacta de autobiografía, aunque se antoja mucha.