Galbraith combina la historia de las ideas y las técnicas empíricas para estudiar, desde un punto de vista económico, la evolución de la desigualdad y su situación actual.
El exgobernador del Banco de Inglaterra explica las causas de la crisis financiera y propone medidas para corregir los desequilibrios de la economía mundial.
Según los autores, la protección de la propiedad privada, la libertad de intercambio y el estado de derecho son elementos indispensables para el desarrollo económico.