Una versión de esta reseña se publicó en el servicio impreso 95/14
Una joven, Emma Haley, consigue en su primera novela, Elisabeth ha desaparecido, un éxito internacional, al ser traducida a veinte idiomas. Poco se nos dice de la autora. Al parecer tiene 23 años, creció en Londres, se hizo encuadernadora de libros, realizó un máster en escritura creativa en 2011 y en 2014 le publican esta obra.
Lo insólito es que una joven de esa edad se meta en la mente de una viuda anciana, Maud, ochenta y dos años, que está perdiendo progresivamente facultades mentales. Su obsesión es que su amiga, también anciana, Elisabeth, ha desaparecido. Lo dice en cada momento, acude cuatro veces a la policía, pone un anuncio en el periódico. Es verdad que tiene l…
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