Vaticano
El laico Carlos Manuel Rodríguez, proclamado beato por Juan Pablo II el pasado 29 de abril, es el primer puertorriqueño que llega a los altares y el que ha tenido una causa de canonización más rápida en la historia reciente: apenas ocho años, mientras que han pasado 38 años después de su muerte, acaecida en 1963. Su causa ha sido más veloz que la del beato Josemaría Escrivá, el fundador del Opus Dei, que duró once años, si bien fue beatificado solo 17 años después de la muerte. A lo largo de su pontificado, Juan Pablo II ha proclamado 1.232 beatos y 447 santos.